Te vi llorando en busca de un par de brazos que apacigüe tu caída, te vi espectante cuando buscabas una mirada que te tranquilizara, te vi necesitado de caricias y sin vergüenza me diste un abrazo tierno y caluroso que rompió las puerta de mi corazón, te vi desolado por cuestiones de una vida que marca el ritmo implacable de lo desconocido, te vi sonriendo ante una multitud de miradas que admiraban tu desempeño, te vi mil veces, y tu mirada, siempre me empapaba de amor.
Sos el hijo que nació del amor entre dos personas que decidieron ser felices y construir, junto a vos, el camino de lo desconocido, para que algún día, puedas construir el tuyo. Sos el deseo que mi vida necesitaba para sentirse completa, un deseo, que se cumplió como aquellos deseos que jamas imaginamos puedan ser realidad. Y aunque sé que mi forma de ser puede resultarte extraña y ofensiva, puedo demostrarte con una sola mirada lo mucho que te amo.
Un día construirás tu camino, el camino que con esfuerzo marcamos juntos, y ese día, orgulloso me acercare a tu mejilla, y con un sencillo roce podre demostrarte que ahí estuvimos, juntos.
Te Amo Roman!
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